«Emboscados», de Fernando Ontañón, en La Voz de Galicia

Patxi era un clásico de la noche coruñesa. Cuando algún periodista conocido llegaba al local donde trabajaba lo recibía con una sonrisa y un saludo retranqueiro: «Un periodista de proximidad». Con esa especie periodística en extinción conforta encontrar al menos a escritores de proximidad. Es el caso Fernando Ontañón (Santander, 1972), criado y afincado en A Coruña. Publica su quinto libro, Emboscados (Bala Perdida), un relato donde una de las protagonistas es periodista free lance. Una amiga suya del gremio dice que con las redes sociales han aparecido los «grafiteros de la información». Y no son Banksy precisamente.

Pero la trama central del libro son las relaciones de pareja, vidas vecinas, matrimonios de la puerta de al lado que a veces esconden ásperas relaciones. Hurga Ontañón en las razones por las que se rompen parejas tras muchos años de vida en común. «La novela no responde a nada. Todo son preguntas mías. No es de autoayuda. No tengo ninguna respuesta», reconoce el autor.

En una de las parejas protagonistas el silencio se asienta durante meses; para Ontañón «el silencio es muy violento». Esa violencia salta cuando la mujer verbaliza crudamente el rechazo a gustos, gestos y vivencias del esposo, dinamitando así todo lo compartido.

En medio de un suceso en un supermercado, uno de los protagonistas cree ver a Denzel Washington guiándole hacia la salida. Es curioso porque el actor acaba de explicar sus casi 40 años de feliz matrimonio: «No hay ningún secreto para el matrimonio perfecto. Todo el mundo tiene sus altibajos; nosotros hemos tenido los nuestros. Pero hicimos un compromiso. Una base espiritual ayuda a todo: el matrimonio, el trabajo, la paz mental». Denzel aporta esperanza, como la novela de Ontañón.